Este próximo viernes 23 de marzo, S. S. el Papa Benedicto XVI, llegará a México en el primer viaje que realiza a nuestro país a casi 7 años de pontificado. Su visita será la sexta que realiza el Obispo de Roma a tierras aztecas, las 5 anteriores por el hoy Beato Juan Pablo II.
Es justo por esto, mis estimados y ficticios lectores, que surgen de inmediato comparaciones entre los dos pontífices, entre los viajes del pasado y este que se avecina.
En mi muy particular percepción, siento que a esta visita pastoral no se le ha dado la misma difusión que se le dio a las del Papa polaco, o al menos no ha tenido el mismo impacto entre los de a pie, esto puede ser por que no visitará México DF o alguna otra gran ciudad, por que es la primera vez que viene al país, o porque en la memoria del colectivo mexicano sigue presente y viva la imagen de Karol Wojtyla como ese Papa declarado mexicano y que vino aún y con esfuerzos por última vez a ver a la Virgen de Guadalupe de quien, recordemos, se declaro ferviente seguidor.
No se si a ustedes les pasó cómo a mi, pero yo no caí en cuenta que vendría el Papa sino hasta la semana pasada, y eso por que me tocó ver un anuncio en televisión. A diferencia de anteriores visitas, esta vez no hay álbumes en Sabritas alusivos al viaje pastoral, ni programas especiales previos, mucho menos una película en puerta de estrenarse.
Religiosamente, como católico que soy, debería ver a ambos pontífices como iguales, puesto que su misión es la misma, pero como humano perceptivo por naturaleza, no podía dejar pasar ese rasgo. Mucha curiosidad tengo de ver la reacción de la gente cuando esté aquí el Papa, reunirá las cantidades de Juan Pablo II en eventos y trayectos, despertará el clamor religioso mexicano volcado sobre Benedicto XVI, habrá hechos violentos que opaquen la visita. Las interrogantes son muchas.
De acuerdo con su agenda, Benedicto XVI arribará a las 16:30 horas al aeropuerto internacional de Guanajuato. Al día siguiente oficiará una misa privada y por la tarde se programa una visita de cortesía al Presidente, para después hacer un saludo desde la Plaza de la Paz de Guanajuato. El domingo se programa misa en el Parque del Bicentenario,el Ángelus, y la celebración de vísperas con los obispos de México y América Latina en la catedral de León.
El Papa está a un paso de llegar a suelo mexicano y las comparaciones se seguirán dando. Ustedes ¿qué opinan?
Fernando Ortiz 
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